viernes, 8 de octubre de 2010

Diario del Festival de Sitges 2010 - Día 2

DíA 2 - 08/10/10



Madrugar para ver cine es algo extraño pero gratificante y más si la película merece la pena. Hoy ha sido uno de esos casos, pues Agnosia de Eugenio Mira es un drama con tintes fantásticos, notable en su dirección e interpretaciones. Incomprensiblemente, la cinta ha sufrido unos cuantos silbidos del público madrugador.

Con buen sabor de boca y sin casi descanso hemos entrado a ver el peculiar remake que Zhang Yimou ha hecho de la ópera prima de los Coen, Sangre fácil. A woman, a gun and a noodle shop se presenta como una comedia absurda, de época y colorista en una primera parte bastante simpática, pero se torna aburrida y repetitiva en sus gags.
Somos lo que hay, de Mexico, tenía muy buena pinta en su planteamiento: una familia de caníbales, de clase baja, intentando sobrevivir tras la muerte del padre. Intento fallido. Es una película mala, con sinsentidos constantes. Olvidable.

Después de comer y realizar el descanso español por excelencia: la siesta; nos dirigimos al cine El Retiro para ver una película alemana protagonizada por el gran Mads Mikkelsen (Casino Royale, Después de la boda,…). Titulada The Door (Die Tür), la película plantea el siempre interesante tema de las “segundas oportunidades” pero con un enfoque de ciencia ficción y misterio muy interesante. Una verdadera sorpresa que gustó al público y a la crítica en general.

Los ciclos de madrugada son actos imprescindibles en el Festival de Sitges. Hoy, el ciclo del cine Retiro estaba dedicado a los asesinos y se proyectaba un cortometraje y tres largometrajes: The legend of Beaver Dam, Tucker & Dale vs. Evil, Hatchet 2 y Primal. El corto The legend of Beaver Dam fue una de las cosas más graciosas vistas por ahora en el festival. Genial. Tucker & Dale vs. Evil no desentonó con el corto pues es una cinta divertidísima, con cantidad de gore y situaciones de lo más originales; todo una delicatessen para los fans de la comedia de terror. Acabada esta película decidí dar por finalizado el día para poder rendir al día siguiente.

El segundo día, con un par de sorpresas agradables. Mañana parece más flojo, veremos qué sucede.

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