Un hombre fue encarcelado
en un sucio calabozo
con aspiración a pozo.
Su pene le fue amputado
y su corazón quemado.
Herido, roto, inservible,
cuando antaño fue invencible,
reflexionó en soledad
y optó evadir la verdad
sabiendo que era imposible.
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3 comentarios:
Un poco deprimente, doloroso y hasta diría que no tan poco gráfico, pero como siempre, se agradece encarecidamente!
Qué tal Alberto, menuda sorpresa hemos tenido...
Aqui te dejo mi enlace y en mi perfil aparece mi e-mail por cualquier cosa.
Saludos!
AH! Soy Santiago Mansilla
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